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Reuniones: miércoles o los jueves de 14:30 a 15:30 en la Facultad de Biología de la Universidad Complutense de Madrid. Aula 3204-B.



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miércoles, 5 de enero de 2011

Ornitorrinco Welles

Hola chicos!! vaya desde que no acudo a las reuniones posteo más que Pablus !! jajaj HAce tiempo hice unos deberes sobre un ornitorrinco y unas lentejuelas(no pregunteís a Santo de qué!!) El caso es que nunca llegué a leerlo y lo he encontrado hoy! me pareció una historia graciosa y aquí os la dejo (y no dejeis de visitar este link http://www.youtube.com/watch?v=XNcdD9xwObM):



El barman lo había visto todo pero no se atrevía a declarar. Así que le preguntaron al borracho si había visto al Ornitorrinco con chaqué de lentejuelas de la noche anterior. El borracho, como buen borracho, no podría haber mentido a aquellos hombres por mucho que hubiera gustado, así que les dijo que no sabía nada y que si un Ornitorrinco era ese bicho tan feo con pico de pato pero con tetas. Dejaron al borracho sujetando la barra y se acercaron a la puta. Era una puta fea. Fea como ella sóla. Fea como el jorobado vizco comiendo limones. Fea como un sapo potando a un orco. Fea como el papa maquillado de payaso y con las cejas de ZP. Fea como la que se sacó los ojos para no verse en e espejo. Fea, como esa otra que prefiere bailar con la pared por no tener que bailar sola. Fea como la amiga de la novia de tu mejor amigo y que siempre te toca a ti tirártela. Y según se iban acercando más fea se les hacía. Fea, fea y fea. Era, un coco, vamos. Así que cuando llegaron a la mesa, les había dado tiempo a juzgarla y con las mismas, se dieron la media vuelta y se alejaron del bar.

Siguieron las huellas del Ornitorrinco y estas les condujeron a un supermercado chino. En lugar de seguir con el caso se metieron en la peluquería de la esquina porque hacía tiempo que tenían las puntas abiertas y ya se les veían las raíces. La peluquera, china también, sólo les cobró 50 arcos por ingles y medias piernas, así que dándole los buenos días y más contentos que Michael Jackson el día que visitó un orfanato, se apretaron un buen café en el bar de enfrente mientras montaban la guardia. Según sus informadoras (dos señoritas despampanantes que allí trabajaban) el Ornitorrinco solía asistir a aquel supermercado una vez por semana (el día de las ofertas de congelados) para probar el género y también el pescado. No tardó en aparecer con su aspecto triunfante y satisfecho, impecable embutido en su chaqué, su sombrero de copa lleno hasta el borde, su bastón de caña en una mano y con su bolsa de congelados en la otra. Preguntaron al Empleado Inexperto qué dónde podían encontrar gambas peladas y,ya que estaban, cogieron un par de bricks de leche que se les había acabado. Entonces vieron al Ornitorrinco conduciendo un carrito. Se dirigía hacia los cereales e iba tan confiado que no se dio cuenta de que le seguían así que a la altura de los Chocapics le echaron el guante. Se lo echaron de lejos así que fallaron. Una gracia, desde luego, pero aún les quedaba otro. Sin quererlo pisaron la montaña de cereales que se había desplomado sobre el pasillo número cinco y que limpiaba con fruición el Empleado Inexperto.

El Ornitorrinco, que no debía de ser muy inteligente y a pesar del estruendo del alud rico en fibra , tampoco se percató. Siguió empujando su carrito por la sección de perfumería mientras silbaba la de los Puentes de Maddison. Le emboscaron a la altura de los lácteos, en la esquina con la panadería, y el pobre Ornitorrinco cayó al suelo dejándolo todo perdido de lentejuelitas que luego el Empeleado Inexperto tuvo que barrer.

El interrogatorio fue duro pero no tanto como la sesión interminable de bingo a la que le sometieron en la que nadie cantaba raya. Por fin se marcharon y le dajaron en paz y el Ornitorrico tuvo tiempo para reflexionar sobre el curso de los acontecimientos. Tardó en llegar a la conclusión mucho tiempo porque no era muy inteligente y no estaba acostumbrado a pensar pero antes de amanecer ya tenía perfilado su plan de fuga. Era muy sencillo: sólo necesitaba tres tacos de plástico de calibre 20, láminas de aluminio semi rígido y cortadas en dos baldas de 5X20X30cm, tornillos de rosca con cabeza estrellada y un atornillador eléctrico pues tenía las aletas sensibles. Y así tendría la estantería de vinos que siempre había querido poner en la cocina. Pasaron tres largos días y decidió desistir de su idea de sumiller en potencia y aprovechar un rato en el que el guardia se fuera a ehcar un meo para largarse de allí. Empujó la puerta tal y como dictaba el cartel, con la suerte de que la encontró abierta y salió a la calle.

El tránsfuga se dirigió hacia el parque pues allí encontraría a alguien para contarle su historia . Cuál fue su sorpresa cuando se cruzo nada más ni nada menos con la que fuera su exnovia, Carla, que como de costumbre estaba deambulando por el parque. Antes le compraba a ella todo, las pelis piratas, las gafas de imitación, alguna china que otra, y el rolex que todos los años le regalaba a su padre por navidad porque estaba tan bien hecho que se lo robaban en la piscina pensando que era bueno.La mala suerte quiso que ella lo viera antes y le tirara al agua sin mediar palabra por todas las perrerías que le había hecho, con la serenidad del que tira un tampón al retrete. Desde el agua el Ornitorrinco pudo ver como Carla se arrepentía y se flagelaba un poco abollando un banco de madera con la cabeza por haberle tratado tan mal y no haberle dado tiempo a explicarse. En el fondo no era mala chica. Mal pronto pero nada más, y después de todo fueron muchas ornitorrincadas.

1 comentario:

  1. Jajaja me encanta la historia, tiene un sabor como de mundodisco q es la polla, y el sapo que pota orcos ni mete!! ahora opinaré sobre cosas que yo hubiera escrito de otra manera : D

    -Preguntaron al Empleado Inexperto qué (este que a que hace referencia?) dónde podían encontrar gambas peladas y...

    - El Ornitorrinco, que no debía de ser muy inteligente y a pesar del estruendo del alud rico en fibra , tampoco (quien más no se percató?) se percató.

    jaja de momento nada más y repito q buenísima historia!!

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